3/21/2008

todos tus muertos

Y ahora que sólo es fotografía
no sé qué tipo de licores se apoderan
de su cielo liviano de sorpresas
ni cuál es la cumbre alucinógena
que siembra el sentido de las brisas
y hace reverencias al mandato de su aliento.

Quise despertar una lluvia que cebara el campo seco,
retorcido de dudas y temores cotidianos,
instalarle un espejo que refleje el universo
de un amor amontonado como caramelos
en un frasco que sólo pudo verse
en oscuras vidrieras de anticuarios.

Cuando eran caricias inmorales,
cuando era abrazo sin atenuantes,
entrelazando una especie de simbiosis natural.
Sólo ayudé a tender la cama,
esperando que sus aguas atraparan ligerezas
y su soplo recitara las palabras que su cuerpo me contaban.

Pero hubo un puñal y hubo una herida
Y un papel que sangra ahora que sólo es fotografía.