2/12/2010

de combustión lenta

arsenal de dulces
pensando que venías
acá, desparramados:
bolitas de cereal
—fortificadas—,
chocolate con maní
la pataia y nutella
tus bonobones
mis jorgitos blancos
nuestros milkiway
y esta remanida
condescendencia.

artesanía con cáñamo.
el cerebro se dispersa
en mil corpúsculos
que juntos no hacen nada
porque algunos se pierden
—o se hacen los perdidos—
y remontan un camino
peligroso, escabrosísimo
de ripios muy agudos
con la intención de ser
las palabras que me quedan
atoradas, que me faltan.